ELFOS



Los Elfos fueron en despertar y aventurarse en Tierra Media. Son una raza noble y agraciada de seres inmortales que se parecen a los Hombres, pero que brillan con una luz interior que rebela un esp�ritu de pensamientos y dones �nicos. Ninguna raza ha sido bendecida con mayor abundancia, ni maldita hasta tal extremo por la mano del Destino.

Aunque b�sicamente similares a los hombres mortales en muchas cosas, los elfos muestran algunas diferencias importantes, aunque sutiles. Como raza son m�s altos que los hombres aunque m�s esbeltos y con menos vello. Los elfos no tienen barba. Los rasgos perfectos y una piel inmaculada se combinan con unos ojos brillantes para dar al elfo un aura encantada. Una extra�a habilidad y facilidad de movimientos les proporciona una cualidad llena de encanto y no es sorprendente que sean tan �giles y ligeros a pie; dejan muy pocas huellas de su paso y pueden andar sobre la nieve reci�n ca�da. Su amable apariencia f�sica oculta grandes poderes, sin embargo, puesto que son muy resistentes a los efectos paralizantes de las temperaturas extremas y son inmunes a las enfermedades.

Tambi�n son inmortales y envejecen de una manera casi imperceptible. Los elfos, com�nmente, s�lo mueren por dos causas: por la violencia o como resultado de su cansancio del mundo. En este �ltimo caso, un elfo se ve consumido por la pena con el transcurso del tiempo, perdiendo por lo tanto la voluntad de vivir. Todos los elfos que fallecen se re�nen en las Estancias de Mandos, el Lugar de la Espera en el extremo occidental de Aman (Valinor). All� esperan el fin del mundo, o son devueltos al mundo para sustituir a otros de su linaje que han perecido. En cierto sentido, los Elfos renacen a menudo como descendientes de s� mismos.

Los Elfos veneran a los Valar, y muchos conocen bien su naturaleza. Pero aun as�, no tienen religi�n formal; en lugar de ello, muestran su respeto mediante la poes�a y la canci�n y se re�nen para celebrar la vida y los dones que vienen de lo alto. Este respeto por la manera en que son las cosas est� muy relacionado con su aceptaci�n de los estrechos lazos que les unen con el Destino, tal y como se estableci� en la Canci�n de la Creaci�n, aunque tambi�n surge de un entendimiento y alegr�a al contemplar las creaciones de la naturaleza que han sido otorgadas y supervisadas por lo Valar. Por encima de todo, con la excepci�n de Eru, veneran a Varda, la reina de los Valar y de las creaciones m�s bellas. Ella es la dadora de luz y la llaman "Se�ora de las Estrellas" (Elentari o Elbereth).

Los elfos no duermen. En lugar de ello, descansan por medio de la meditaci�n, que implica recuerdos, acontecimientos pasados que guardan con una gran intensidad. Normalmente, entran en ese estado de trance durante unas dos horas cada d�a, aunque pueden funcionar durante muchos d�as descansando muy poco o nada. Mientras est�n meditando, los elfos son muy dif�ciles de despertar; salen del trance en un momento que han decidido con anterioridad. Esta forma de descansar est� de acuerdo con la atracci�n que los elfos sienten por la noche. Los humanos se han referido a ellos a menudo como el Pueblo de las Estrella con buena raz�n, ya que los elfos ven en una noche estrellada ve un humano en pleno d�a. La visi�n de los elfos es muy apropiada para la semioscuridad de los bosques frondosos o de los cielos nublados y les permite una movilidad que no posee ninguna otra raza. En la oscuridad absoluta, sin embargo, sufren como los dem�s; no pueden ver nada.

Su sentido del o�do tambi�n es soberbio y sin duda tiene mucho que ver con las habilidades de los elfos para la m�sica. Su veneraci�n por el canto no tiene parang�n y ha afectado a su idioma y a la manera en que guardan los recuerdos m�s preciados. Los elfos fueron los primeros en utilizar la palabra hablada y ense�aron a las dem�s razas el don del habla; de ah� el nombre que se dan a si mismos: "Quendi", los parlantes. Los bardos elfos, pues, han tenido pocos problemas a la hora de conservar las historias y haza�as de su raza en forma de colecci�n de maravillosas canciones y poes�a declamada.


Existen dos grandes grupos de elfos en Tierra Media. Su separaci�n en los comienzos de la Primera Edad sirvi� de base para el desarrollo de dos cultura �lficas separadas. El grupo m�s exaltado es de los Eldar , las tres razas (Noldor, Vanyar y Teleri) que hicieron el gran Viaje a trav�s de Tierra Media durante la Primera Edad. Muchos de ellos se establecieron en Aman (Las Tierras Inmortales) durante un tiempo, o a lo largo de las costas de la ahora sumergida Beleriand. S�lo los Noldor y los Sindar (un grupo de los Teleri) permanecieron en Tierra Media una vez que la Guerra de la C�lera marc� el fin de la Primera Edad. Todos los dem�s elfos se llaman Avari o Elfos Silvanos. Tambi�n les llaman com�nmente elfos de los bosques.

De estas culturas vienen los tres grupos que forman las razas �lficas de Tierra media: los Noldor, los Sindar y los elfos Silvanos

ELFOS NOLDOR

ELFOS SINDAR

ELFOS SILVANOS

MEDIOELFOS

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